El modelo de gestión propuesto provee a la dirección herramientas que le permiten identificar, monitorear y accionar de manera ágil las palancas claves del negocio.
A la vez otorga a los directores de inteligencia de datos las bases para diseñar un modelo desde una perspectiva estratégica y escalable.
Mediante la detección de factores críticos, la asignación a roles y la aplicación de la gestión por potencial para analizar indicadores se podrá establecer un sistema de toma de decisiones que potencie la productividad de los recursos.
Durante las sesiones de planificación estratégica deben definirse la cadena de valor propia del negocio y los factores críticos de acuerdo con la información de mercado y las capacidades clave detectadas.
Cada instancia de la cadena de valor está conformada por un conjunto de procesos que pueden agruparse en factores críticos para el cumplimiento de los objetivos del negocio.
Al definir los alcances de cada factor crítico, podrá distinguirse las necesidades del cliente, los procesos y los indicadores únicos que evaluarán su desempeño.
El conjunto de factores críticos definidos constituye un sistema de procesos que permite el funcionamiento sostenible del negocio.
Estos factores se relacionan entre sí de acuerdo con la instancia del negocio en la que se encuentren (eslabón de la cadena), su naturaleza y con la correlación existente entre los indicadores que miden su desempeño.
Teniendo en cuenta la naturaleza de cada factor crítico podrán ser asignados a cada rol del equipo de trabajo, para que mediante la misma técnica de análisis cuantitativo puedan trabajar en conjunto dentro de un sistema ordenado.